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Tratamiento con medicamentos de terapia dirigida contra el cáncer de riñón

A medida que los investigadores aprenden más sobre los cambios genéticos y proteínicos en las células que causan cáncer, ellos han desarrollado medicamentos más recientes que atacan a algunos de estos cambios. Los medicamentos de terapia dirigida son distintos a los que se usan comúnmente en la quimioterapia. Suelen funcionar mejor contra el cáncer de riñón que los medicamentos de quimioterapia estándar y a menudo tienen efectos secundarios diferentes.

¿Cuándo se utilizan los medicamentos de terapia dirigida para el cáncer de riñón?

Tratamiento del cáncer de riñón avanzado

Medicamentos de terapia dirigida para tratar el cáncer de riñón avanzado. Uno de estos medicamentos normalmente forma parte de la primera línea de tratamiento para los casos de cáncer de riñón en etapa avanzada en conjunto con algún medicamento de inmunoterapia.

Se pueden emplear diversos medicamentos de terapia dirigida para tratar el cáncer de riñón. Si uno no surte efecto, se puede tratar con otro. Todavía no está claro si una secuencia de medicamentos es mejor que otra. Actualmente se realizan las investigación para ayudar a encontrar una respuesta ante esta cuestión.

Terapia adyuvante después de la ³¦¾±°ù³Ü²µÃ­²¹

El medicamento de terapia dirigida, sunitinib (Sutent), también se podría ser una opción como tratamiento adyuvante después de la ³¦¾±°ù³Ü²µÃ­²¹ en personas con alto riesgo de recurrencia para ayudar a disminuir el riesgo de que el cáncer regrese.

Medicamentos de terapia dirigida para tratar el cáncer de riñón

La mayoría de los medicamentos de terapia dirigida empleados en el tratamiento contra el cáncer de riñón funcionan al bloquear las proteínas referidas como tirosinas cinasas dentro de las células cancerosas que normalmente fomentan su desarrollo o a que generen nuevos vasos sanguíneos que alimentan al tumor. Los medicamentos que se dirigen a este tipo de proteínas se conocen como inhibidores de la tirosina cinasa o TKI.

Medicamentos dirigidos al crecimiento de los vasos sanguíneos del tumor (angiogénesis)

Sunitinib (Sutent)

El sunitinib actúa bloqueando tanto la angiogénesis como varias tirosina quinasas en las células cancerosas que son importantes para su crecimiento y supervivencia.

Este medicamento se toma como una píldora diaria, generalmente en ciclos de 4 semanas con un intervalo de 2 semanas sin tomarlo entre ciclos. Algunos médicos podrían recomendar tomarlo en ciclos de dos semanas seguido por una semana de descanso hasta que el médico lo indique, con el fin de aminorar los efectos secundarios entre ciclos.

El sunitinib se puede utilizar para tratar a algunas personas con cáncer riñón en etapa avanzada. También podría ser una opción después de la ³¦¾±°ù³Ü²µÃ­²¹ en personas con un alto riesgo de que el cáncer regrese o para ayudar a reducir este riesgo, aunque es más probable que en esta situación se utilice un medicamento de inmunoterapia como pembrolizumab (Keytruda).

Los sunitinib secundarios más comunes son:

  • ±·Ã¡³Ü²õ±ð²¹²õ
  • Diarrea
  • Cambios en el color del cabello o la piel
  • Úlceras (llagas) en la boca
  • Debilidad
  • Bajos de recuentos en el nivel de glóbulos blancos y glóbulos rojos

Otros efectos posibles incluyen cansancio, cansancio, hipertensión arterial, afecciones cardiacas, sangrado, síndrome de pies y manos, y niveles bajos de la hormona tiroidea.

Pazopanib (Votrient)

El pazopanib bloquea varias tirosinas cinasas involucradas en el crecimiento de las células cancerosas y en la formación de nuevos vasos sanguíneos en el tumor. Este medicamento se aplica por vía oral con píldoras o pastillas que generalmente se toman una vez al día.

Algunos efectos secundarios comunes de este medicamento son:

  • Hipertensión arterial (presión alta)
  • ±·Ã¡³Ü²õ±ð²¹²õ
  • Diarrea
  • Dolores de cabeza.
  • Bajos recuentos sanguíneos
  • Cambios en el color del cabello

Puede que causar en pruebas de laboratorio para evaluar la función hepática anomalías en los resultados, aunque en pocas ocasiones puede causar daño hepático grave que podría amenazar la vida. También se pueden presentar problemas con sangrado, coagulación y curación de heridas.

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